miércoles, 6 de agosto de 2008

ANTES

Entonces lo dicho
en la orilla de lo que he mencionado
cuando he sonreido
cuando he llorado
cuando soy un doble reflejo de los aguaceros eternos en tus ojos
y en los míos la pelea
por conformar una hilera de sospechas
la sospecha soy yo
ante un millar de posibilidades
todas posibles
como decirme lo que sigo escuchando
murmullo de circulos en las orillas
de los deseos absurdos
un deseo absurdo
no aceptar que estás aquí
y yo estoy aquí
a veces vestido de goce
a veces vestido de llanto
por el capricho enojoso de la voluntad quebrantada
las veces en que me miro dentro de ti
la arena en los pies
y tu cuerpo repleto de sed
retos
la madrugada y tu voz en medio de mis primeros pasos
sin la vergüenza acostumbrada
para apilar las quejas de quien no se ha mirado en la hoguera
tú, la hoguera
las mil lenguas del fuego en mi cuerpo
mis uñas
mis vellos
mis callos
mis nalgas
y tu envolviéndome
bailando el permiso de las danzas privilegiadas.

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